Quienes no saben lo que dice la Biblia sobre los desastres naturales afirman que son un castigo para toda la humanidad. Sin embargo, esto no es cierto. La Biblia nos habla explícitamente de momentos en los cuales Él realmente se ha preocupado por nosotros y no es el culpable de nuestro sufrimiento.
Erupciones, inundaciones, tormentas, terremotos… los desastres naturales son las fuerzas más destructivas que existen. Son incalculables los daños que producen y, además, no se pueden controlar. Solo se puede rezar para que estos cesen y luego reconstruir lo perdido.
La Biblia contempla los desastres naturales como un castigo para aquellas personas con corazones malvados (Génesis 18:23-32). Ellas mismas fueron advertidas sobre esto y muchos lograron salvarse. De hecho, las personas de corazones bondadosos jamás se vieron afectadas por dichos desastres.
¿Cómo entender lo que dice la Biblia sobre los desastres naturales?
Entre lo que dice la Biblia sobre los desastres naturales, podemos encontrar:
- Siempre sea precavido, los desastres naturales pueden ocurrir en cualquier momento. Por eso es importante tener un botiquín de primeros auxilios con todo lo necesario para este tipo de situaciones.
- También debemos dejar de lado las pérdidas materiales puesto que lo más importante es la preservación de la vida. Nada traemos a este mundo y tampoco podemos llevarnos nada (1 Timoteo 6: 7,8). En base a esto, se debe hacer todo lo posible para cuidar el bienestar de nuestra familia.
- Recuerde que Dios se preocupa por nosotros y sufre cuando sufrimos (Isaías 63:9). A través de La Palabra, Él siempre está presente en los momentos difíciles.