Su autor testaba: “Con el cáncer, mi piel se ha adelgazado. Percibo más de cerca a Dios. Siento su aliento cálido. Amo y beso, también, con más cariño a los pobres a quienes hasta ahora atendía. Me he dado cuenta de lo que vale un amigo… ¡Y la familia! Ahora, al escribir, el corazón me sangra por la pluma…”.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.