- 1. Cuando te despiertes por la mañana procura respirar hondo, sonreír y agradecer a Dios la vida.
- 2. Sería estupendo comenzar la jornada tomando conciencia de que Dios está contigo.
- 3. Puedes leer al menos una frase del Evangelio y rumiarla a lo largo del día.
- 4. Una hermosa forma de parecerte a Jesús es cuidar la vida, cuidar toda vida.
- 5. Cambiará tu vida si cada día evitas la preocupación y practicas la confianza en la Providencia.
- 6. Dedicar tiempo al descanso, pasear, disfrutar de la naturaleza que cada día es una fiesta para tus sentidos, y hará que fácilmente brote en ti la alabanza.
- 7. Dios siempre está. Intenta descubrir su presencia cuando estés en contacto con la naturaleza, cuando estés con los amigos o en familia, cuando estés a solas.
- 8. Procura ser la expresión viva de la amabilidad de Dios. Regalando una sonrisa a quien encuentres en tu camino, una palabra amable, una mirada de cariño.
- 9. Sería maravilloso que llevaras siempre en los labios una palabra de esperanza, en las manos un gesto de paz, en los pies un alivio para los que están en las orillas.
- 10. El amor no descansa ni en verano. Puedes aprender de María a estar atento/a a las necesidades de los otros y brindarles tu ayuda.
- 11. Y cuando llega la noche, abandonarte en los brazos de ese Padre que cuida tu vida con amor infinito y vela tu sueño será la mejor garantía para disfrutar de un feliz descanso.
Editorial Monte Carmelo
La promesa que llevamos sobre el hombro y el dolor cuando muere un ser querido
De alguna forma nos tomó desprevenidos la promesa que todos llevamos en el hombro, y no sabemos qué hacer cuando muere un ser querido. Nos